Somos un Colegio que nos definimos como tal por contribuir a la sociedad con la formación de una comunidad educativa integral, formando hombres y mujeres justos, para que ejerzan responsablemente su derecho a realizarse como personas y a contribuir al bienestar de los demás, inspirados en los valores inherentes a Dios y la familia. Se postula atender las necesidades, intereses y expectativas de sus alumnos, padres, apoderados y profesorado, a través de una educación participativa, de calidad, que considera la formación de valores humanos y el desarrollo de hábitos, habilidades, destrezas e internalización de aprendizajes, con un especial énfasis en el desarrollo de una actitud solidaria frente al entorno.

Buscamos promover y generar oportunidades de desarrollo y superación, optimizando la calidad de los aprendizajes, en especial de aquellos alumnos que presentan necesidades educativas especiales, integrándolos e incorporando a la familia como principal agente de apoyo en el quehacer educativo cultural del colegio, siendo los padres y apoderados actores fundamentales del proceso de formación al ser el hogar la primera base educativa de toda sociedad.

Junto con desarrollar en nuestros alumnos grados crecientes de autonomía personal y valorización de la vida sana y positiva integración a la sociedad, se plantea como un aspecto importante desarrollar una positiva convivencia escolar, siendo un aprendizaje que forma para la vida en sociedad, y una dimensión fundamental de la formación ciudadana, que apunta al desarrollo de mujeres y hombres libres, sensibles, solidarios y socialmente responsables en el ejercicio de la ciudadanía, capaces de respetar a las personas y al medio ambiente, de manera que puedan iniciarse en la tarea de participar, incidir, empatizar, solidarizar y mejorar la vida de su entorno y su país. En consecuencia, los ejes sobre los cuales orientamos todo nuestro que hacer pedagógico y formativo son; Convivencia, Responsabilidad, Solidaridad.